La papaya es una de las mejores frutas del mundo, tanto por su valor nutritivo, como por su poder medicinal. Uno de sus más importantes principios es la papaína, reconocida como superior a la pepsina y muy usada para proporcionar alivio en los casos de indigestión aguda. También tiene efectos benéficos sobre los tejidos vivos. La papaya es un alimento apacible e ideal para el desayuno, pues satisface las exigencias nutricionales del organismo, por la mañana, limpia el aparato digestivo. Contribuye, además, para el mantenimiento del equilibrio ácido-alcalino del cuerpo, y, en su función, sobrepasa el propio melón, que es considerado uno de los mejores álcali-formadores. La papaya se sirve para admirables combinaciones con otras frutas - higos, ciruelas, uvas - frescas o secas, pudiendo ser comido al natural, o con miel de abejas.